La energía de amar – San Valentín

La energía de amar San Valentín | Mütta Café - Láminas para despeinarse

Me encanta el día de San Valentín, no sólo porque el amor está en el aire (aunque suene cansino), me gusta porque hoy cumple años la loquita que me da vida a golpe de colores y de esencia de esos otros mundos donde habita a menudo.

Para mí el amor es una espiral roja, vibrante y poderosa, un generador de energía que se expande cuando entra en bucle con el talento, la curiosidad, la sorpresa, la gratitud… la energía de amar.

Soy un generador de amor despeinado, müttante y con patas, por eso suelo me pintan muchos corazones alrededor.

Ojito con confundir la energía de amar con la ñoñería comercial.

Vivir en la energía de amar es sentir un profundo respeto hacia mí misma, que es donde comienza el respeto hacia los demás.

Vivir en la energía de amar definir es sentirme caminante, exploradora despeinada ante el reto de ser más y mejor.

Vivir en la energía de amar es respetar cada etapa de mi camino, dar espacio al aprendizaje de las caídas y mucho gas al impulso de las remontadas.

Vivir en la energía de amar es mirarme y verme, es mirarte y verte, es beberme a morro la luz que sale por tus ojos, coserte a latidos, fundirme contigo, es tocarnos de verdad, sin habernos puesto la mano encima.

Vivir en la energía de amar es disfrutar opíparamente de la libertad de elegirme, de saber que soy suficiente, de elegirte porque sumas en mi vida.

Vivir en la energía de amar es mimar cada detalle sin esperar nada a cambio, un roce en la mano, una sonrisa, una tarta de cumpleaños…

Vivir en la energía de amar es acoger y dejar marchar, es vivir en coherencia conmigo,

Como conductora en la energía de amar, llevo la “L” en el cristal trasero, practico practico y practico con la ventanilla bajada dejando que el viento me despeine el corazón.

Feliz San Valentín llenito de energía de amar.

Que la müttación te acompañe.